¿Qué es el amor? ¿Existe realmente?
En un blog no vas a encontrar la respuesta final, pero esta es mi conclusión al menos parcialmente.
Si llegaste hasta acá es porque tenés dudas sobre si existe o no el amor. Al menos si crees que el amor existe dirías que buscás algo que aún no sabés del amor, y estás acá por eso, buscando completar tu concepción del amor.
No va a ser fácil, te lo resumo; andá al último párrafo donde está mi conclusión final, pero si estás dispuesto a discutir el asunto estamos aquí dispuestos a buscar juntos el camino a la definición del amor.
Frente al escéptico total, que afirma que son supercherías que solo se “viven en telenovela” me inclino, por admirar su fuerza mental para negar al producto social llamado “amor”, y negarlo casi arbitrariamente. Yo digo; el amor existe, aunque tengas muy buenas razones para negarlo y eliminarlo del lenguaje como si fuese un verbalismo inocuo, yo voy a seguir usándolo. ¿Por qué? Porque si negase su existencia no tengo la fuerza de voluntad para ser un individuo en una marea inmensa de personas que vaya a contra corriente.
O por otro motivo más argumentativo que no hace referencia a mis fuerzas combativas: El amor si existe.
Sin ánimo de generar un grueso informe como un trastornado estudioso (estudioso que no soy) voy a resumir algunas premisas aparentemente inconexas y a unirlas de modo de defender mi tesis con ellas ensambladas.
En la “época clásica del pensamiento” (griegos 400ac 200dc aprox.) nos informan los historiadores (ideólogos) que el amor era un acto entre hombres, y raro entre hombre y mujer. Aunque el poema de sobre el amor, que dice que en el comienzo los humanos tenían 4 pares de piernas y brazos, y dos cabezas, algunos macho y hembra, otros macho y macho y el resto hembra y hembra, al ser separados, por no me acuerdo que Dios, entonces fueron alejados, y en esta vida que les toca vivirla separados están siempre en atención a encontrar su pareja, no es esta la idea que los historiadores muestran predominante; los griegos eran unos homosexuales que andaban desnudos mostrando su sexualidad por la polis ateniense, ante la mirada alarmada y espantada de las ciudades bárbaras aledañas. A Pericles le recriminaban tener a una mujer a su lado en toda ocasión, no recuerdo si Pericles era monogámico, o si era exclusivamente heterosexual, pero si recuerdo que se generaban opiniones negativas hacia el, y creando una imagen de que era un hombre débil por estar al lado de su esposa o por no seguir las buenas costumbres homosexuales griegas.
Luego los afganos tengo entendido tenían hasta hace unos años, antes de la lucha armada (EEUU invade Afganistán so pretexto de eliminar a Bin Laden, ex agente encubierto preparado por
Debería hacer un recorrido por religiones tipo la hinduista, la brahmánica, los islámicos otros, pero eso significaría hacer una investigación más seria que esta recopilación de datos sobre “el amor” en las épocas y las culturas.
Finalmente, mi última recopilación es sobre mi única referencia bibliográfica certera llamada “la mirada del marciano” escrita por mi profesor de antropología en el CBC, Bonaparte “nosecuanto”.
En cuanto al amor la historia que cuenta en este libro es bastante reveladora: el amor “occidental”, o el amor que vivimos nosotros en mayoría Americana, y Europea y demases descendientes, es el amor que profesaban las cortesanas a los señores nobles, fruto de una corriente de pensamiento romántico, tanto literario como de índole “material”, digámosle en frases marxistas: las condiciones para que las mujeres piensen en caballeros rescatándolas de dragones malvados, para casarlas en el altar de la catedral de su reino, fueron que surgió la nueva clase social; la burguesía , que los matrimonios empezaban a ser mas fluidos, ya no serian un contrato matrimonial para acceder al dote de la amada (hija del rey o conde o cualquier zanguango con plata), o para establecer la paz entre naciones o regiones dando herederos que sean hijos comunes. Ahora el lazo sería el afecto “amor”, y no la cosa económica. ¿No amigos Marxistas?
Antes de las revoluciones industriales las orgías y la poligamia no serian mal vistas, sino síntomas de ser parte de la clase obrera, las infidelidades serian cosa leve, que incumbía al afectado directamente y no a los familiares ni a los vecinos como ocurre ahora que si uno es infiel te mira mal hasta el colectivero flor de cornudo.
Mi conclusión (fuertemente ligada a la tesis antropológica de Rafael Bonaparte) es que el amor es una idea, en formación constante, una idea mutante, que es actualmente la predominante para hablar de las parejas monogámicas, pero que como cualquier pauta social, norma moral y demases leyes humanas, no son perennes ni menos, son maleables, destruibles, convertibles, olvidables, perfectibles etc. El que habla de amor habla de “algo” de su época, no todos dicen lo mismo al hablar del amor, y eso está bien que sea asi, porque como soy creyente en que ni la objetividad existe, y que la individualidad tiene peso, entonces celebro que las personas modifiquen , destruyan, mejoren, parcialicen y desmiembren los usos de las palabras a como se les antoje.
Yo actualmente amo a mi mamá, a carolina, a cecilia, a Carlos (que está enojado conmigo) y demás gente que sería exceso de publicidad hablar de ellos, y como estudié en Ética, el “bien” es una palabrita que tiene infinidad de usos diferentes porque no es definible (no hay consenso definitivo), ¿Qué palabra es completamente definible?
¿Los números lo son? Nah.
2 comentarios:
MMMMmmmm mamá en primer lugar.... lástima que te pedí que no hablaras de mi... si no estaría en tu lista ¿no?
y vos sos...?
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